jueves, 10 de diciembre de 2015



Sabemos bien que no basta decretar la igualdad en la ley si en realidad no es un hecho. Para que así lo sea, la igualdad debe traducirse en oportunidades reales y efectivas para ir a la escuela, acceder a un trabajo, a servicios de salud y seguridad social; competir por puestos o cargos de representación popular; gozar de libertades para elegir pareja, conformar una familia y participar en los asuntos de nuestras comunidades, organizaciones y partidos políticos.


2 comentarios:

  1. Excelente perspectiva sobre el tema, la igualdad de género no debe ser tomada simplemente como un decir y ya, va mucho más allá de eso, debe ser un tema de conciencia en una sociedad donde se acostumbra a pensar del mismo modo.

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  2. Concuerdo con el comentario de Jessi, la equidad de genero debe ser respetada y tomarla siempre en cuenta.

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